Floración y siembra
En primavera y verano los bulbos no necesitan mucho trabajo para su florecimiento. Esta época para ellos es la época de floración. Para obtener una floración invernal hay que comprar unos bulbos especiales, sometidos a la técnica del forzado.
Ambos tipos pueden plantarse en macetas, pero tanto uno como otro florecen una sola vez en casa, por lo que hay que comprar nuevos ejemplares cada año. Los bulbos no deben desecharse después de la floración porque plantándolos en un jardín, a 15 cm, de profundidad pueden florecer al año siguiente.
En la época de otoño e invierno para obtener una fructífera floración, sobre todo durante el período navideño, se plantan bulbos expresamente “Forzados”. En septiembre, por otro lado, se plantan como en primavera, y en enero se plantan usualmente bulbos no forzados.
Cuidados ideales
Estos asombrosos bulbos pueden plantarse incluso en una escudilla sin orificios de drenaje, siempre que al regar, se procure no saturar de agua el compost. Se pone una capa de compost en el fondo del recipiente y sobre el mismo se colocan los bulbos, lo más cerca posible los unos de los otros, de modo que casi se toquen. Se llenan de compost los espacios intermedios entre los bulbos dejando asomar solamente la punta de los mismos.
La escudilla que contiene los bulbos se deja en un lugar fresco, oscuro y húmedo, y se cubre con una capa de turba de unos 15 cm, de espesor; para ello se puede enterrar toda la escudilla en turba al aire libre o meterla en un cajón lleno de turba en una habitación fresca de la casa.
Cuando empiecen a emerger las puntas de las hojas se traslada la escudilla a un lugar iluminado, a unos 10° C, de temperatura, y se va aumentando gradualmente ésta hasta alcanzar los 18° C. Una vez en las macetas, los bulbos deben ser regados regularmente.
Se puede hacer florecer bulbos jacinto colocándolos en la boca de unos tarros especiales de cristal llenos de agua, de modo que la base del bulbo roce apenas la superficie del agua. Los bulbos así tratados difícilmente florecen una segunda vez.
Recomendaciones finales
El bulbo del jacinto no es tan natural como el del narciso, pero si queremos conservar la planta después de la floración, la trasplantaremos a una maceta grande con un sustrato fértil y la colocaremos en una terraza, balcón o ventana.
Las hojas seguirán creciendo, cuanto más grandes y verdes sean, más podremos asegurarnos de que los bulbos que quedan bajo tierra crezcan lo suficiente como para que florezcan una o dos nuevas flores el año que viene.