El Pleiospilos nelii es una de esas pequeñas bellezas que conviene tener en maceta si no se quiere perder. Una de las cosas más interesantes de esta especie es que existe la variedad verde, que es la que puedes ver en la imagen superior, que produce flores amarillo-anaranjadas; y otra de color morado con flores rosadas que también es realmente preciosa conocida como Royal Flush.
A mí me gusta llamarlas joyitas, al igual que a los Lithops, Argyroderma y suculentas similares. Su tamaño es reducido, pero es precisamente por eso por lo que son plantas con las que se pueden hacer composiciones increíbles, de esas que duran. Así pues, veamos cómo se cuida el pleiospilos.
Origen y características del Pleiospilos nelii
Imagen – Flickr/Eric BarbierNuestro protagonista es una planta crasa o suculenta no cactácea (recordemos que las suculentas son aquellos seres vegetales que usan alguna o varias partes de su cuerpo para almacenar agua, haciendo que las susodichas se vuelvan a menudo carnosas) originaria de Sudáfrica, donde vive a una altitud comprendida entre los 870 y los 1250 metros de altitud. Su nombre científico es Pleiospilos nelii, y su nombre común pleiospilos; aunque a veces se comercializa con el nombre de piedra viva, algo que puede llevar a confusión pues ese es el nombre popular de los Lithops.
Sus hojas son carnosas, de hasta ocho centímetros de altura, y existen como adelantábamos dos variedades:
Pleiospilos nelii: de hoja verde con puntitos de un color más oscuro, y flores amarillo-anaranjadas.
Pleiospilos nelii var Royal Flush: de hoja morada y flores rosadas.
Florece en primavera, e incluso un poco antes si el invierno es cálido. Cuando lo hace, y si está en el exterior, atrae a insectos tan beneficiosos como a las abejas, quienes disfrutan alimentándose. Además, como contienen una interesante cantidad de polen, es relativamente fácil conseguir semillas, tras la polinización cruzada (es decir, llevando polen de una flor de un ejemplar a otra de otro, bien de manera natural como lo hacen los polinizadores, o bien de manera artificial con la ayuda de un pincel).
¿Cuáles son los cuidados que requiere?
Si quieres tener un ejemplar, te recomendamos proporcionarle los siguientes cuidados:Ubicación
Por propia experiencia, recomiendo tenerlo en el exterior, a pleno sol. Es una planta que para poder crecer bien y tener un correcto desarrollo necesita estar expuesta al astro rey.Ahora, si en el vivero la tenían protegida, acostúmbrala poco a poco y de forma gradual, ya que de lo contrario se quemará.
Tierra
Maceta: puedes mezclar sustrato universal con perlita a partes iguales, pero es mejor un sustrato más poroso, tipo pómice, kiryuzuna o incluso gravilla fina de obra (con una granulometría de 1-3mm) mezclada con un 30% de turba negra.
Jardín: no recomendamos su plantación en el jardín. Debido a su escaso tamaño, sería demasiado fácil perderlo, a no ser que tuvieras un rincón un poco diferenciado del resto, por ejemplo bordeado con piedras, con suculentas. En cualquier caso, si quieres tenerlo en el suelo, la tierra ha de ser porosa, con excelente drenaje.
Riego
El riego ha de ser escaso, solo cuando la tierra o el sustrato estén completamente secos. Durante el invierno, regar una vez al mes o cada mes y medio.Si le tienes puesto un plato debajo, acuérdate de retirar el agua que sobre después de regar, pues de lo contrario el Pleiospilos nelii se pudrirá.
Abonado
El abonado es aconsejable para que la planta pueda gozar de una mejor salud, por lo que se debe de abonar desde comienzos de primavera hasta finales del verano con un abono líquido específico para cactus y otras suculentas, siguiendo las indicaciones especificadas en el envase.Pero eso sí, hay que tener presente que con este aporte de abono no se va a conseguir que aumente de tamaño. Es decir, si tenemos una planta joven, lo que hará será sacar las hojas nuevas algo más rápido de lo que haría si no se abonara, pero tampoco es algo que se pueda llegar a ver bien.
De todos modos, el objetivo del abonado del pleiospilos no es otro que el de conseguir eso, que esté lo suficientemente bien para que, en caso de enfermedad o de plaga, pueda combatirlas con normalidad.
Multiplicación
Se multiplica por semillas en primavera. Para conseguirlas son necesarios dos ejemplares que estén floreciendo al mismo tiempo, para poder pasar el pincel sobre cada una de las flores (primero por una e inmediatamente después por la otra) durante varios días. Así, verás que pronto los pétalos caerán y se formará el fruto, el cual estará lleno de semillas.Estas se han de sembrar en macetas con sustrato universal mezclado con perlita a partes iguales, cubriéndolas con una muy fina capa de sustrato o de arena de río previamente lavada. Después de regar, se coloca el semillero en el exterior, a pleno sol o, como mínimo, en una zona luminosa.
Si todo va bien, germinarán en unos 10-15 días a una temperatura de unos 20ºC.
Plagas y enfermedades
Es bastante resistente en general. Simplemente hay que controlar mucho los riegos para evitar infecciones por hongos, y a los caracoles.A veces, si el ambiente es seco y muy cálido, podría tener pulgones en las flores. Aun así, no es algo que no se pueda quitar con un bastoncillo de las orejas empapado en alcohol de farmacia.
Rusticidad
Imagen – Flickr/DornenwolfEl Pleiospilos nelii es una planta sensible al frío y a las heladas. Sobretodo la escarcha, el granizo y ya ni digamos la nieve, daña seriamente sus hojas. Pero te puedo afirmar que si la tienes por ejemplo en una zona resguardada, aunque la temperatura baje hasta los -2ºC de forma puntual puede sufrir daños pero menores.
De todas maneras, si en tu zona hace más frío, o no te quieres arriesgar, no dudes en meterlo en un invernadero o dentro de casa.
¿Qué te ha parecido el Pleiospilos nelii?