Entre ellas encontramos la menta, el romero o la manzanilla, por ejemplo; unos ingredientes procedentes de la naturaleza que adquieren un gran protagonismo en la vida de las personas que desean cuidar la piel.
¿Quieres disfrutar de las ventajas que te ofrecen las mascarillas para el rostro elaboradas con plantas? Entonces no te pierdas estas sencillas y prácticas recetas.
Mascarilla de menta para la piel grasa
La menta es una planta que desprende un aroma súper fresco y agradable y que se convierte en el producto ideal para cuidar la piel grasa debido a sus propiedades astringentes y antiinflamatorias, las cuales reducen el exceso de sebo y eliminan los granos.
Ingredientes
Una cucharada de hojas de menta fresca
Medio limón
Un disco de algodón
Pasos a seguir
Exprime el limón y vierte su jugo en el interior de un vaso.
Pica la menta con un cuchillo y colócala en el mismo recipiente en el que has vertido el zumo de limón.
Empapa un disco de algodón en el líquido y extiéndelo sobre el rostro limpio y seco sin cubrir la piel que rodea los ojos y los labios.
Deja que esta mascarilla casera de menta y limón actúe durante 15 minutos.
Finalmente, retírala con agua templada y aplica una crema hidratante libre de aceites.
Recuerda que deberás aplicar esta mascarilla natural a diario si quieres eliminar el acné y el exceso de grasa.
Mascarilla de romero y harina de avena para una piel luminosa
El romero es otra planta magnífica para preparar mascarillas para el rostro caseras y naturales. Esto es debido a sus elevadas dosis de vitamina C, ideales para llenar la piel de luminosidad, mantener el cutis limpio y poner fin a las impurezas.
Ingredientes
Una cucharada de hojas secas de romero
2 cucharadas de harina de avena
Una taza de agua
Pasos a seguir
Calienta el agua hasta que entre en ebullición.
Cuando rompa a hervir agrégale las hojas secas de romero y retírala del fuego.
Deja que la infusión repose unos 10 minutos y, pasado ese tiempo, fíltrala con un colador para retirar las hojas de romero.
Mezcla el líquido resultante con la harina de avena para formar una pasta homogénea y aplícala en la piel limpia y seca con un suave masaje circular y sin cubrir el contorno de los ojos y de los labios.
Deja que la mascarilla haga efecto durante 15 minutos y, finalmente, retírala con agua tibia, seca el rostro y haz uso de tu crema hidratante favorita.
Pon en práctica este truco de belleza casero una vez a la semana para lucir una piel limpia, bonita y luminosa.
Mascarilla de manzanilla para la piel sensible
Finalizamos este recorrido por diversas mascarillas para el rostro elaboradas con plantas con un truco de belleza de manzanilla, una planta también conocida como camomila famosa por sus propiedades calmantes.
Unas sustancias que hacen que sea perfecta para mimar las pieles sensibles y eliminar rojeces e irritaciones en solo unos pocos minutos.
Ingredientes
Una bolsita de manzanilla
Medio vaso de agua
Un trocito de algodón
Pasos a seguir
Calienta el agua.
Cuando empiece a hervir agrégale la bolsita de manzanilla y quítala del fuego.
Espera unos 10 minutos para que la tisana tenga tiempo de enfriarse un poco y, después, métela dentro de la nevera.
Pasada una hora sácala del frigorífico y extiéndela sobre el cutis con suaves toques usando un pedacito de algodón como si se tratara de un tónico convencional.
Recuerda que no será necesario que enjuagues la manzanilla con agua tras su aplicación.
Puedes recurrir a este remedio casero todos los días si lo deseas.
Si deseas conocer más tips de belleza caseros para el cuidado de la piel no te marches sin visitar el post titulado Blanquear la piel con patata.
¿Qué opinas sobre estas mascarillas para el rostro elaboradas con plantas?
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