En Europa, el ciprés es símbolo de duelo y quizás por eso adorna los cementerios. El origen de esta creencia es muy antiguo: las coníferas están asociadas a la idea de inmortalidad y resurrección, ya que su resina es incorruptible y su follaje persistente, pues las heladas del invierno, no consiguen hacerle perder sus hojas. En la tradición cristiana, encontramos este árbol en boca de orígenes que ve en él un símbolo de las virtudes espirituales, pues el ciprés desprende muy buen olor, el olor de la santidad. Representa la esperanza de la vida en el más allá.
Leyendas orientales
En la China antigua, las semillas del ciprés se usaban para asegurarse longevidad y se decía que si se frotaban los talones con la resina del ciprés, se podía andar sobre las aguas, pues el cuerpo se volvía ligero. En Japón, los cetros de los sacerdotes se hacían de hinoki, una variedad del ciprés. Y los fuegos rituales se encendían frotando dos trozos de madera de este mismo árbol. Igualmente, esta madera es la que se utilizaba para la construcción de los templos.También el Islam fue cautivado por la belleza y serenidad de este árbol. Las tumbas musulmanas de Anatolia, Turquía, están decoradas con representaciones de cipreses y en el Palacio Imperial de Topkapi, en Estambul, encontramos mosaicos con siete cipreses representados. En España, concretamente en el Generalife de la Alhambra de Granada, podemos contemplar la belleza de este árbol: los cipreses centenarios, de más de seis siglos de vida, hacen de este paseo un lugar que difícilmente puede caer en el olvido.
Propiedades terapéuticas
Ya en el siglo I d.c, el médico griego Dioscorides mencionaba las propiedades curativas del ciprés como diurético, contra la disentería, contra las hemorragias, etc. Debido a sus propiedades vasoconstrictoras, el ciprés es utilizado para tratar las enfermedades relacionadas con el aparato circulatorio que estén relacionadas con el sangrado o inflamación de las venas, tales como varices y flebitis.Uno de los componentes del ciprés, el tanino que está presente en sus frutos, está especialmente indicado para acelerar la curación de las heridas, ayudando a cicatrizarlas y detener el sangrado. Por ello, es muy útil cuando se presentan problemas de diarrea, hemorroides, sangrado por la nariz, hemoptisis, etc. Otro de sus componentes es un aceite esencial rico en sustancias que le otorgan numerosas propiedades (astringente, antiséptico, tónico, vasoconstrictor, antirreumático, diurético, calmante de la tos, expectorante, etc), por lo que es muy utilizado en tratamientos para resolver problemas de: tos, catarros, bronquitis, faringitis, gripe, asma, sinusitis, acné, sudoración, sabañones, seborrea, hernias, úlceras y heridas abiertas, etc.
La industria farmacéutica utiliza el aceite esencial del ciprés en la composición de algunos medicamentos e igualmente es utilizado en cosmética debido a sus numerosas propiedades.
Imágenes: Sxc.hu
Material utilizado
Botanical-online.com
Webislam.com
Diccionario de los símbolos. JEAN CHEVALIER/ALAIN GHEERBRANT. (Herder, Barcelona, 1995).
Diccionario de los Símbolos y Mitos. J.A. Pérez-Rioja. Ed. Tecnos S.A (1988).