El Cercidiphyllum japonicum es un arbolito de gran belleza. Tiene un porte elegante, y una copa ordenada y llena de hojas que recuerdan a las de otros árboles muy usados también como ornamentales: los Cercis, siendo el C. siliquastrum el que más cultivamos en España. Pero no nos desviemos.
Nuestro protagonista es una planta perfecta para incluir, por ejemplo, en el diseño de un jardín japonés, ya que al igual que otras muchas especies originarias del país nipón, necesita suelos ácidos para poder mantener las hojas verdes, y no con carencias de hierro.
¿De dónde es originario el Cercidiphyllum japonicum?
Se trata de un árbol originario tanto de Japón, tal y como su apellido nos indica, como también de China. En sus lugares de origen puede hacerse una planta muy grande, superando incluso los 30 metros de altura, pero cuando se cultiva es raro que supere los 10 metros. Pero en cualquier caso, que sea más pequeño no le resta belleza alguna; más bien al contrario: casi se diría que lo convierte en un árbol más bonito, y también, ¿por qué no decirlo?, más fácil de controlar.
Las hojas son redondeadas y verdes, pero a diferencia de las que tienen los Cercis, las del árbol de Katsura, como también se llama, son opuestas. Además, tienen una coloración otoñal llamativa, pues el verde deja paso al amarillo y/o al rojo, dependiendo de la variedad o cultivar que se tenga.
Florece a comienzos de primavera, antes de que las ramas se llenen de hojas. Las flores pueden ser femeninas o masculinas, y se encuentran en árboles distintos. Asimismo, es importante decir que ninguna de ellas tiene pétalos. En cuanto a las semillas, son aladas.
¿Para qué se usa el árbol de katsura?
El Cercidiphyllum japonicum es un árbol al que solo se le da un único uso: como planta ornamental. Se cultiva en jardines, tanto privados como públicos, en aquellas regiones donde las condiciones le son favorables; es decir, en zonas donde disfrutan de un clima templado, con veranos suaves e inviernos fríos, y donde las precipitaciones van cayendo a lo largo de todo el año.Por ello, no es una planta que sea idónea cultivar en climas que, aunque son templados, tienen veranos muy calurosos, como en el mediterráneo, ya que la planta se resentiría.
¿Cuáles son los cuidados del Cercidiphyllum japonicum?
Es un árbol que cuando las temperaturas y la tierra son las adecuadas, no es difícil de cuidar. Pero cuando esto no es así, puede llegar a ser muy exigente. Por eso, es importante que hablemos de cuáles son sus necesidades como especie, ya que así le daremos la oportunidad de mantenerlo con vida:Ubicación
Siempre que el clima sea templado, con temperaturas suaves e inviernos con heladas, podremos tenerlo a pleno sol. Pero si en verano se superan los 30ºC durante varios días, lo mejor será colocarlo en un lugar protegido del astro rey, ya que así evitaremos que se queme o se resienta.Tierra
Imagen – Wikimedia/peganumCrece más sano y se consigue un mejor colorido otoñal si se planta en suelos ácidos; es decir, en tierras cuyo pH (o grado de acidez) sea entre 4 y 6. En tierras alcalinas es común que sufra clorosis férrica como consecuencia de la falta de hierro, y aunque se puede evitar durante muchos años que se manifieste, haciendo un agujero muy grande (de al menos 1 x 1 metro), cubriendo los lados excepto la base con plástico y llenar el hoyo con sustrato para plantas ácidas, con el tiempo las raíces llegarían al fondo de ese agujero, tocando la tierra alcalina.
Por eso, por experiencia cuidando otros árboles que quieran tierras ácidas, si la que tienes en el jardín no lo es, es preferible tenerlo en maceta con sustrato cuyo pH sea bajo, como . Como tolera la poda, llegado el momento podría plantarlo en una maceta de gran tamaño, de las que tienen un diámetro y un alto de unos 80cm, y formarlo como arbolito.
Riego
El árbol de Katsura no soporta la sequía, ni siquiera un poco. La tierra puede permanecer completamente seca uno, dos días, pero no más. Pero cuidado: esto no significa que haya que regarlo a diario. Durante el verano sí que puede ser necesario regar cada dos días, especialmente si las temperaturas son muy elevadas y el calor es extremo, pero el resto del año hay que esperar a que la tierra se seque un poco para reducir o evitar la pudrición de las raíces.Además, hay que saber que la mejor agua para regar es la de lluvia, aunque si no es posible conseguir, se podrá regar con agua apta para consumo.
Abonado
Especialmente si se tiene en maceta, para conseguir que el Cercidiphyllum japonicum mantenga su color natural y sano, recomendamos abonarlo desde el momento en el que brotan sus flores (o las hojas, si todavía es joven y no ha florecido aún), en verano y hasta que veamos que las hojas empiezan a cambiar de color en otoño. Por ejemplo, se puede usar un abono o fertilizante ácido, como este de aquí.Multiplicación
Imagen – Wikimedia/Gerd EichmannEl Cercidiphyllum japonicum se multiplica por semillas en primavera. Simplemente tienes que llenar una maceta con sustrato para plantas ácidas, regar y enterrar un poco las semillas, procurando que queden separadas entre sí.
Si son viables, brotarán al cabo de unas ocho semanas.
Rusticidad
Es un árbol muy rústico, capaz de soportar las heladas de hasta los -20ºC. Sin embargo, el calor extremo (+30ºC durante varios días seguidos) lo debilita.¿Has visto alguna vez un Cercidiphyllum japonicum?