Se le considera una práctica ecológica, ya que permite la reutilización se materiales que se han desechado y permite, controlar la temperatura y la evaporación, permitiendo un uso más eficiente del agua.
Tipos de acolchado
Existen dos tipos de acolchado, orgánicos e inorgánicos.
Acolchados orgánicos
El compost y el estiércol
Destacan por su gran fertilidad, dan buenos resultados en jardines y alrededor de los árboles y arbustos, aunque hay que renovarlos de forma continua.
La paja y el heno
Protegen a las plantas menos resistentes en invierno y sirven tanto debajo de los árboles y frutales como de las plantas de fresa.
La corteza y la fibra de coco
Dan buenos resultados si se empapan bien en verano, ya que retendrán la humedad e irán desprendiendo agua lentamente. Pueden aplicarse sobre la tierra y también sobre papel, cartón o plástico.
Los recortes de hierba
Son un medio barato y efectivo de acolchar la tierra, ya que alimentan el suelo y estimulan la aparición de lombrices, aunque hay que tener en cuenta que pueden enraizar y convertirse en malas hiervas.
Los acolchados inorgánicos
Lamina de plástico
No necesitan de una renovación tan continua y bien camuflados son igualmente efectivos. Una lámina de plástico sobre un suelo trabajado calentará el terreno e impedirá el crecimiento de hierbajos por la técnica de la solarización. Además el calor concentrado puede acabar con larvas de especies dañinas que puedan encontrarse en la tierra.
La arena y la gravilla
Ayudan a conservar la humedad del suelo, protegen a las plantas del frío e impiden el nacimiento de plantas no deseadas o maleza.
El acolchado en diferentes temporadas
Durante el verano el acolchado o mulching evita la evaporación del agua. Además protege el terreno de la erosión causada por el calor fuerte. Es preferible el uso de acolchado orgánico ya que es el más efectivo en esta época.
En el invierno usaremos el acolchado como protección del cuello de las plantas más sensibles a las bajas temperaturas, amontonando tierra alrededor de la base de plantas como los rosales y las hortalizas. También se conoce esta técnica como aporcada.
Para evitar el efecto de las heladas también nos servirá el mulching, ya que retiene el calor y favorece el crecimiento de los vegetales.
Recomendaciones
Se recomienda usar una capa de hojas, corteza o acículas de pino e, incluso, plástico para que no afecte el hielo.
Si preparamos una zona de plantación para el futuro también se puede acolchar para que el terreno se mantenga más caliente y pueda acoger mejor a las plantas llegadas el momento.
La preocupación mundial por la conservación y el cambio climático, ha hecho que la mayoría de los agricultores y jardineros, utilicen acolchados orgánicos o en su defecto biodegradables, cuidando el medio ambiente y evitando la contaminación.