Sin embargo, como todo en esta vida, hay que buscar el perfecto equilibrio y evitar que la mala hierba supere una altura o volumen que pueda afectar negativamente a nuestros cultivos y plantas o impida trabajar correctamente a nuestra maquinaria o dificultarnos nuestra mano de obra.
Aquí entran en juego las desbrozadoras, equipos mecánicos que consiguen recortar la hierba o césped para dejarla a una altura definida, perfecta para seguir ofreciendo las ventajas de conservación del suelo pero sin la problemática comentada anteriormente. Además, estos recortes también pueden funcionar como abono verde, al descomponerse lentamente y devolver los nutrientes absorbidos de nuevo al suelo.
En este artículo te contamos la importancia del mantenimiento del jardín o suelo, el uso de esta maquinaria agrícola y algunos consejos para elegir una desbrozadora con ruedas en caso de que trabajemos sobre superficies medias o grandes.
Ventajas del uso de desbrozadoras en un jardín o suelo agrícola o jardín
Siguiendo con el hilo anterior, una cubierta vegetal mínima, pongamos a una altura no superior a los 10 cm, proporciona ventajas sobre todos los niveles físico-químicos de un suelo. Y esta idea debe tenerse muy en cuenta en países donde se sufre una alta degradación de suelos y erosión, y España es uno de ellos. La pendiente de cultivo, la escorrentía propia de lluvias fuertes en la zona mediterránea y el arado agresivo fomentan la pérdida de calidad de suelo.En general, un mantenimiento periódico de la superficie anexa al cultivo mediante el desbrozado proporciona las siguientes ventajas:
Mayor conservación de humedad en el suelo y optimización del agua de riego.
Se aporta al suelo nutrientes a partir de los restos vegetales cortados.
Aumenta la oxigenación y respiración del suelo gracias a las raíces de hierbas adventicias.
Se fomenta la diversidad de insectos para lograr un equilibrio biológico y reducir el ataque de plagas.
Aumento de la diversidad microbiológica en el medio.
Se reduce o evita el uso de herbicidas.
Se evita la escorrentía de agua de lluvia, especialmente en terrenos con pendientes.
De todas ellas, la que más valoramos positivamente es el aumento de la conservación de humedad en el suelo. Cuando los rayos solares no inciden directamente sobre el terreno, sino que pasan por un filtro previo como es la hierba o césped recortada, la humedad en el suelo perdura hasta 3 veces más. Esto tiene enormes ventajas, tanto desde el punto de vista de formación de materia orgánica, como fomento del desarrollo microbiológico.
Por otra parte, una superficie vegetal reduce la velocidad de escorrentía del agua, algo que limita enormemente el arrastre de nutrientes, tierra o piedras que causan daños y erosión en el medio.
¿Cómo desbrozar un terreno?
La tarea del desbrozado, podemos pensar que puede llegar a ser difícil y con mucha mano de obra, pero no es así, ya que actualmente tenemos varios grupos de desbrozadoras a elegir dependiendo de la superficie que tengamos.Desde la típica desbrozadora manual que funciona con batería o gasolina para pequeñas superficies, hasta la desbrozadora con ruedas, como término medio, acabando con una superdesbrozadora tirada por tractor, capaz de lograr recortar grandes superficies de desbrozado en muy poco tiempo, a velocidades de hasta 15-20 km/h.
La operación de desbrozado de un terreno es sumamente fácil. Solo es necesario ser ordenado y repetir los movimientos de corte una y otra vez. Si utilizamos maquinaria manual, es algo más complicado ya que somos nosotros los que definimos la altura de corte con nuestro movimiento. Sin embargo, otro tipo de maquinaria más profesional como las desbrozadoras de ruedas permite regular automáticamente la altura.
En el jardín, suele ser habitual realizar siempre el mismo movimiento para desplazar la hierba o césped cortado al lado donde ya hemos trabajado, de forma que resulta mucho más cómodo continuar con el desbrozado.
En cuanto a la posición de inicio, hay mucha gente que prefiere empezar por el centro y continuar haciendo movimiento circulares en espiral hasta completar toda la superficie. Otros prefieren empezar en una esquina e ir poco a poco. Realmente da igual, mientras se haga de forma ordenada.
Altura de desbrozado recomendada
La altura de conservación de restos vegetales en un suelo depende de la funcionalidad que busquemos. A nivel de jardín, el desbrozado habitual se realiza en el césped, donde se buscan de 2 a 3 recortes por año. La altura de corte recomendada para este caso suele ser de 5 a 7 cm, consiguiendo el equilibrio entre número de recortes (cuanto más largo, más rápido crece) y una superficie vegetal suficiente para evitar un parón de crecimiento.En el caso de que queramos limpiar una zona de malas hierbas, podemos ajustar la altura al mínimo, suficiente para trabajar con comodidad y retrasar el futuro crecimiento de las hierbas adventicias lo máximo posible.
Y en el caso de terrenos productivos, suele ser frecuente aumentar la altura hasta 10-15 cm, de forma que se deja suficiente masa vegetal para permitir la presencia y el resguardo de insectos auxiliares que ayudarán a controlar a diferentes plagas en el cultivo.