En este post os hablo de la fibra de coco como substrato. Una alternativa muy interesante para proporcionar a nuestras plantas y hortalizas un medio en el que pueden desarrollarse y crear un sistema radicular fuerte y sano como base para que luzcan sanas y fuertes.
Para la elaboración de este substrato se utiliza el mesocarpio del fruto del coco, es decir la parte intermedia del fruto y procede de los"residuos" de la industria cocotera una vez que se han aprovechado otras partes para el consumo en otros tipos de industria como la alimentaria. La fribra de coco para poder usarse como substrato tiene que pasar por un período de compostaje previo así como de lavado para eliminar las sales y otros elementos y una vez realizadas estas tareas se compacta para distribuirlo como substrato para el cultivo de vegetales.
Es un substrato muy adecuado para su utilización tanto en semilleros como en macetohuertos o incluso para incorporar a las huertas y huertos urbanos para mejorar la calidad de nuestros suelos ya que este substrato tiene propiedades muy interesantes que sin duda hay que tener en cuenta y que paso a resumiros a continuación:
Substrato con una buena porosidad
Retiene una gran cantidad de humedad
Es un substrato con capacidad drenante
Favorece el desarrollo de las raíces
Es un substrato económico
Favorece el crecimiento de las plantas
Facilita la absorción de sales minares
Bajo peso
Es un substrato, que para todas esas personas que quieren cultivar sus propios alimentos en un macetohuerto o para los amantes de las plantas ornamentales, muy interesante por su versatilidad y por un aspecto muy importante a tener en cuenta cuando el espacio es un punto a tener en cuenta. Y es que el substrato de fibra de coco se distribuye, entre otros formatos, en forma de ladrillo o briqueta compactado. Esto facilita su almacenaje cuando como os comentaba el espacio puede ser un problema.
Como podéis ver en esta imagen el substrato viene compactado y deshidratado y un ladrillo como el que te pongo como ejemplo pesa aproximadamente unos 500 o 600 gramos. Su forma y reducido tamaño nos facilita el almacenaje ya que podemos tener un buen número de ellos guardados en un rincón de nuestras casas.
Este pequeño bloque nos facilitará una cantidad de substrato, una vez que añadimos agua y lo hidratamos, equivalente a unos 9 o 10 litros de material rehidratado que podremos utilizar para mezclar con otro tipo de substrato o que si lo preferimos utilizar como único substrato de cultivo tanto para hortalizas, plantas ornamentales o incluso para la elaboración de los semilleros y germinar nuestras propias semillas con todas las garantías de éxito.
Yo he recurrido a la fibra de coco para la elaboración de semilleros por primera vez esta temporada y tengo que deciros que el resultado ha sido bastante satisfactorio. Además, incluso podría decir que probablemente se convierta en el substrato prioritario a la hora de germinar las semillas de la temporada. Su alto poder de retención de agua pero con su capacidad de drenaje y la no compactación, sin duda lo convierten en un substrato muy apropiado para este fin.
A continuación os dejo un vídeo en el que podéis ver cómo hidratar la fibra de coco para usarla como substrato, ya que hacerlo cuando viene compactada va ser difícil, y podréis ver también algunos de los semilleros de esta temporada con la fibra de coco como único substrato. Espero qué os guste y sobre todo que os sirva de ayuda.
Hasta aquí el artículo dedicado a la fibra de coco, espero que os haya gustado y que si no conocíais este substrato os haya servido para que ahora conozcáis un nuevo recurso a tener en cuenta a la hora de cultivar vuestras hortalizas o plantas ornamentales.
Muchas gracias por vuestro tiempo. Un fuerte abrazo y recuerda, Nos vemos en la huerta!!!
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Foto de Jonas Dücker en Unsplash
Fuente: este post proviene de Diario dun neno labrego, donde puedes consultar el contenido original.
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