Todos los años sembramos en la huerta unas plantas de calabazas de adorno. Es un cultivo marginal que nos da muy poco trabajo y las pequeñas calabazas ornamentales nos acompañan durante todo el año.
Las calabazas son plantas anuales de la familia de las cucurbitáceas, como los melones, sandías, calabacines, pepinos, etc. Las que se utilizan para adorno suelen ser pequeñas y tienen la cáscara dura y gruesa. Estas propiedades posibilitan su conservación durante mucho tiempo.
Las calabazas llegaron a España desde América, en el siglo XV.
Semillas de calabazas de adorno
Siembra
Inicialmente compramos semillas de una casa comercial y obtuvimos nuestras propias semillas. Pretendimos cosechar pequeñas calabazas de varios colores, tamaños y texturas. Esto no lo conseguimos con nuestras semillas híbridas, por lo que todos los años las adquirimos.
Las cultivamos en una huerta donde únicamente tenemos arboles frutales, en los márgenes de alguna de las regaderas que unen los alcorques.
Hacia finales del mes de mayo, una vez concluido el periodo de heladas, sembramos directamente las semillas, asegurándonos que la tierra tenga tempero (humedad suficiente). Cavamos medio metro cuadrado con la azada, eliminamos las malas hierbas y sembramos dos o tres semillas por golpe. Si nacen tres, eliminamos una plantita.
Flores de calabazas ornamentales
Cultivo
Son plantas reptantes y trepadoras que alcanzan gran desarrollo, varios metros.
Del tallo principal surgen varios tallos secundarios. Los orientamos manualmente hacia las zonas soleadas y secas, donde no llega el agua de riego, por donde se extienden en forma de tapiz.
En los tallos se desarrollan numerosas hojas y zarcillos, por lo que a veces los dirigimos hacia el vallado por donde trepan y fructifican muy bien.
El cultivo lo hacemos al aire libre y es importante que las de el sol directamente, por eso evitamos dirigirlas bajo las copas de los árboles.
Son plantas muy rústicas, el único cuidado que necesitan es regarlas y nosotros lo hacemos por inundación en verano, a la vez que regamos los árboles frutales.
Calabazas trepadoras
Florecen abundantemente. Las flores son de color amarillo/anaranjado, con cinco pétalos soldados en su base. Son unisexuales, hay flores masculinas y femeninas, que necesitan la actividad de la multitud de insectos polinizadores que pululan por la huerta para ser fertilizadas. Al mezclarse el polen, las nuevas semillas serán híbridas y si las sembramos es muy probable que la forma y color de las calabacitas que cosechemos no tengan nada que ver con sus progenitoras.
Parte de nuestra cosecha de este año
Recolección
Hay que recolectarlas cuando están maduras y antes de la llegada de las heladas otoñales. Suele ser entre mediados y finales del mes de octubre por lo que cada año tenemos las cosecha renovada para la fiesta de todos los Santos o Halloween, en otras culturas.
Estas calabazas no son comestibles, o al menos nosotros no las consumimos. Son pequeñas y la corteza es gruesa y muy dura.
El color de estas pequeñas calabazas decorativas varía entre amarillo, naranja, blanco y verde, en muchas de ellas se mezclan estos colores en distintas formas y proporciones.
La piel puede ser lisa, más o menos rugosa o verrugosa.
La forma puede ser ovoide, redondeada, piriforme, alargada, en forma de turbante, de ovni, etc.
Calabazas recolectadas
Las plantas secas se arrancan y las dejamos sobre el terreno para incorporar su materia orgánica.
Las calabazas que no recogemos las retiramos para evitar que al año siguiente nazcan espontáneamente.
Calabaza hongo o turbante turco y otras ornamentales
Conservación
Colocamos las calabazas en lugares secos, aireados y en ausencia de luz. Si esperamos un mes veremos que algunas no estaban bien maduras y se pudren, las desechamos. El resto las utilizaremos de adorno y con fines decorativos.
Curiosidades
Como se extienden copiosamente entre los árboles frutales evitan el crecimiento de malas hierbas y nos ahorran desbrozar estas zonas.
Si disponéis de un terreno al aire libre soleado, es suficiente una jardinera o un rincón de un jardín y podéis organizar su riego en verano, os animamos a que sembréis unas calabazas de adorno variadas. Las podéis poner tutores o dirigir sus abundantes tallos hacia una valla donde crecerán y formarán un seto con coloreados frutos. Las calabazas recolectadas os durarán un año, si no hay insectos podéis polinizar las flores con un bastoncillo de algodón, y como su fructificación es abundante, podréis también regalar algunas a familiares o amigos.
Cesta con calabazas