Vamos a ser sinceros: hay cactus… que lo que menos parecen ser es precisamente eso, cactus. Los Rhipsalis son un claro ejemplo de lo que acabamos de decir. Y es que, a diferencia de la gran mayoría de especies de cactáceas, nuestros protagonistas no tienen espinas largas; de hecho en ciertos casos no disponen de ese tipo de ‘armas’ defensivas.
Sin embargo, sí que tienen tallos verdosos, a través de los cuales pueden realizar la fotosíntesis sin problemas, y por lo tanto, crecer… a su manera.
Origen y características de los Rhipsalis
El género Rhipsalis está compuesto por unas 35 especies de cactus epífitos distribuidos por Centroamérica hasta el norte y centro de Suramérica. Son propios de las regiones tropicales y subtropicales, de modo que sus necesidades de agua son algo más altas que las de sus congéneres.Si hablamos de sus características, son cactus epífitos, que desarrollan tallos más o menos cilíndricos y largos de color verde. No suelen tener espinas, pero en caso de tenerlas, estas son muy cortas y blanquecinas.
Principales especies
Las más conocidas son las siguientes:Rhipsalis baccifera
Imagen – Wikimedia/SalicynaEl Rhipsalis baccifera, conocido popularmente como la disciplinaria de Cuba o ripsalis, es una especie originaria de América Central y del Sur, que ha conseguido naturalizarse en las regiones tropicales de África. Desarrolla tallos con espinas muy cortas, y produce flores blancas.
A día de hoy se acepta el nombre científico Rhipsalis cassutha como sinónimo de R. baccifera.
Rhipsalis cereuscula
Imagen – Flickr/salchuiwtEl Rhipsalis cereuscula es una especie de cactus endémica de Bolivia, Brasil, Paraguay, Uruguay y de Argentina. Desarrolla tallos cilíndricos, y produce flores blancas.
Rhipsalis cruciformis
El Rhipsalis cruciformis es un cactus oriundo de Brasil, Argentina y Uruguay que desarrolla tallos triangulares y carnosos, sin espinas. Produce flores rosadas.Rhipsalis pilocarpa
Imagen – Wikimedia/ZalofmEl Rhipsalis pilocarpa es una especie de cactus endémica de Brasil que desarrolla tallos cilíndricos armados con espinas. Produce flores blancas.
¿Cuáles son los cuidados que hay que proporcionarles?
Si te animas a tener un ejemplar de Rhipsalis formando parte de tu colección, o ya no de ella, sino de tu balcón o terraza por ejemplo, te recomendamos proporcionarle los siguientes cuidados:Ubicación
Estas son plantas que han de estar colocadas en una zona muy luminosa, sin sol directo. Es por eso por lo que es preferible tenerlas en el exterior. Ahora bien, si en tu vivienda dispones de una habitación orientada al este, y entra mucha luz a través de las ventanas, probablemente crezcan bien ahí.Tierra o sustrato
Maceta: para asegurar el buen enraizamiento y un desarrollo correcto, recomendamos rellenarla con una mezcla de sustrato universal y perlita a partes iguales.
Usa macetas con agujeros en la base para que el agua pueda salir.
Jardín: al ser plantas epífitas, es decir, plantas que viven sobre otras, puedes tener Rhipsalis creciendo en el hueco de un árbol por ejemplo.
Riego
Imagen – Flickr/epiforumsEl riego ha de ser moderado, algo más seguido que el que se le da la mayoría de cactus. Por lo general, se han de regar unas 3 veces por semana durante el verano, y 1-2 veces a la semana el resto del año. Durante el invierno, regar poco o nada, solo una vez al mes o cada 15 días.
Si tienes dudas, comprueba la humedad de la tierra o sustrato por ejemplo con un medidor de humedad digital, o escarbando un poco con los dedos.
Abonado
Es aconsejable abonar al Rhipsalis durante toda la temporada de crecimiento, es decir, desde primavera hasta verano, e incluso puedes alargarla hasta otoño si vives en una zona donde el clima es suave o cálido todo el año.Utiliza abonos específicos para cactus, y sigue las indicaciones especificadas en el envase del producto. De esta manera, evitarás el riesgo de sobredosis, y de paso, también conseguirás mantener a tu planta correctamente alimentada.
Poda
No la necesita, pero si ves que está creciendo demasiado puedes recortar sus tallos un poco y hacer esquejes en primavera o verano 😉 .Multiplicación
Los Rhipsalis se multiplican por esquejes sobretodo, y a veces por semillas, en primavera. Sepamos cómo se hace:Esquejes
La manera más fácil de conseguir nuevos ejemplares es aprovechando los restos de poda para plantarlos en macetas individuales con vermiculita o fibra de coco.Si se va manteniendo el sustrato húmedo y la maceta colocada en semisombra, en un par de semanas emitirán sus propias raíces.
Semillas
Las semillas se han de colocar sobre sustrato universal mezclado con perlita a partes iguales, para luego ser cubiertas por una fina capa de arena de río previamente lavada o pómice.Es importante no amontonarlas, pues de lo contrario a medida que vayan creciendo se perderán varias.
Manteniendo el sustrato húmedo y en una zona luminosa (sin sol directo), germinarán en unos diez a quince días.
Época de plantación o trasplante
Cada dos años, en primavera.Rusticidad
Los Rhipsalis son muy sensibles al frío y a las heladas, siendo la temperatura mínima que soportan es 10 grados centígrados. Si en tu zona baja más, no dudes en proteger a tus cactus dentro de casa, en una habitación donde no haya corrientes de aire.¿Dónde comprar?
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