No preocupeishon! hasta un insumo tan escaso y desconocido hoy en día como la paciencia se puede cultivar -literalmente, y aquí les traigo 5 vegetales con los que podemos empezar:
Lechugas: La primera planta en la que pensamos cuando queremos hacer dieta para bajar el pavo, los tamales y las tortas que nos comimos en Navidad puede estar a menos de 30 días de tu plato si la plantas desde semilla, o inmediatamente si la compras en un invernadero, con la ventaja de quedarte de una vez con una provisión constante de este precioso vegetal. La puedes cultivar en la huerta o en macetas dentro de tu casa. No es quisquillosa, no necesita mucho mantenimiento, con que la pongas en la ventana más soleada de tu casa o apartamento basta. Sólo asegúrate de ponerle agua. Busca variedades de corto crecimiento como la Grand Rapids o Maravilla 4 estaciones para tener una producción constante. El color burgundí de La Red Salad Bowl o la Brigitte le pueden dar un toque de intriga a tu próxima ensalada!
Rúgula o Rúcula: No me canso de decirle al mundo lo mucho que me gusta la rúgula y lo agradecida que es. Es otra de las verduras que se deja degustar en 30 días o antes si queremos disfrutar los brotes.
Igual que la lechuga, sólo pide espacio en una ventana soleada o en un parche olvidado de la huerta. Puede que uno u otro bicho quiera comersela antes que nosotros pero se soluciona regandole un poco de cáscara de huevo pulverizada en la base. Desde las ensaladas hasta las pizzas o los crêpes, la rúgula es una versátil amiga de la cocina y de aquellos a quienes les llama la atención la horticultura pero no saben por dónde empezar.
Rábanos: Gusten o no, los rábanos son un vegetal obligado para experimentar, incluso en una maceta.
En promedio pueden producir tubérculo en 35 días y aparte de sol, suelo fértil y humedad, los rábanos no necesitan demasiados mimos. Si los dejamos producir semillas, tendremos una provisión constante de rábanos para partir y compartir.
Habichuelas, Arvejas y Fríjoles: Las leguminosas no se desarrollan completamente en un mes pero es una de las que muestran más cambios en menos tiempo, lo que hace que uno esté a la expectativa todos los días a ver qué hay de nuevo.
Adicionalmente, su capacidad para fijar nitrógeno al suelo las hacen una buena opción para empezar con pie derecho una huerta. Existen variedades de habichuelas que pueden madurar en 60 días así que tampoco es que se hagan esperar demasiado tiempo.
Tomátes Cherry: Puede que no sean vegetal de un mes como los anteriores pero son de los que más emocionan!.
Las variedades de tomátes cherry nos dan la alegría de probar el delicioso sabor de esta fruta en un tiempo más corto que las variedades más grandes, en promedio unos dos meses y medio desde germinación.
Impacientes por empezar?
Qué esperan? Feliz cosecha!